miércoles, 27 de septiembre de 2017

Hablemos de la minería en Salamanca, Guanajuato.

  De entrada se oye raro, pero, una vez que ubicamos el sitio georáficamente, vemos la lógica que hay en relación a la mina que hay en la Joyita de Villafaña; para esto debemos entender que por mina no solo existen las de metales, sea oro que plata o cobre. "La minería es una actividad económica del sector primario representada por la explotación o extracción de los minerales que se han acumulado en el suelo y subsuelo en forma de yacimientos. Dependiendo del tipo de mineral a extraer la actividad se divide en minería metálica (cobre, oro, plata, aluminio, plomo, hierro, mercurio, etc.) que son empleados como materias primas básicas para la fabricación de una variedad de productos industriales. Mientras que la minería no metálica o también denominadas de cantera y construcción (arcilla, cuarzo, zafiro, esmeralda, granito, mármol, mica, etc.) son usados como materiales de construcción y materia prima de joyería, ornamentación, entre otros usos. Otro tipo de minería, es la extracción de los minerales energéticos o combustibles, empleados principalmente para generar energía, como por ejemplo el petróleo, gas natural y carbón o hulla" (Wikipedia).

  Con esta idea, vemos que al sur de Salamanca hay varias canteras, los mogotes, lomas y cerros que hay por el libramiento son explotados para obtener de allí piedra volcánica, usada en la construcción. Hacia el norte, por el norte, entre los ranchos Majadas de Ancón y Barrón existe la extracción de piedra con las quebradoras de piedra, en este caso es piedra dura, que se comercializa como grava, esto debido a que la composición del suelo es diferente, no volcánico como lo es al sur. No lejos de allí entre La Ordeña y Los Hernández, hay otra quebradora de piedra, una más por Cerrogordo. Pero, en términos de metales, es por la Joyita de Villafaña que los hay, veamos:

   “Salamanca destaca en la actualidad en el panorama industrial debido a sus múltiples factorías, y también en el agrícola por sus magníficas tierras de cultivo, además de que esto fue y sigue siendo una actividad muy importante para la economía del municipio. Existe sin embargo, un aspecto al que se presta poca atención y que ofrece buenas probabilidades de explotación: la minería.

  Si bien es cierto que no se tienen vetas con grandes yacimientos de oro y plata que puedan competir con la de Valenciana de Guanajuato, por ejemplo, si se encuentran algunos de caolín, promaceta, grava, arena, tepetate y estaño, que de explotarse racionalmente constituirían en una fuente de trabajo nada despreciable.

  Los datos que en seguida vertimos nos fueron proporcionados por el señor Ernesto Javier González Méndez quien fungía en 1988 como presidente del Consejo Directivo de la Sociedad Cooperativa de Producción Minera Metalúrgica Gambusinos del Estado de Guanajuato, y quien radica en Salamanca.

  Según las indicaciones hechas por le señor González ha concluido que: “en el norte de nuestro municipio, que colinda con el de Guanajuato, se encuentran yacimientos de diferentes minerales, metálicos y no metálicos, que deben ser estudiados para promover su explotación especializada, ante las agencias del gobierno Federal o empresas particulares para que se trabajen, y de esta forma dar ocupación a los habitantes de esa región, que es de las más necesitadas de nuestro municipio”.

  Estos datos los dio a conocer el 22 de marzo de 1979 mediante una ponencia presentada al entonces candidato a la gubernatura del estado, licenciado Enrique Velasco Ibarra. En la misma, establece: “concretamente cerca del poblado de Joyita de Villafaña existen unos yacimientos de estaño de los que él señor Francisco Villafaña proporcionó unas muestra al Presidente Municipal, ingeniero Alberto Martínez Estrada y por intenciones del mismo se mandaron ensayar al laboratorio de control químico metalúrgico de San Luis Potosí, habiendo dado resultados prometedores (… asimismo en otros lugares del municipio de Salamanca existen yacimientos de caolín, tepetate, grava, piedra barza, cobre, etc., que es necesario estudiar y en su caso promover su explotación, ya sea por medio de cooperativas ejidales o empresas mixtas, si se encuentran dichos yacimientos en ejidos, o promover su explotación por parte de recursos minerales o empresas privadas.

   En ponencia presentada tiempo más tarde (mayo 6 de 1985) por el señor Ernesto González ante otro candidato a la gubernatura del Estado, licenciado Rafael Corrales Ayala, actual mandatario de la entidad, precisa su información cuando informa que durante la administración municipal que abarcó el periodo 1980-1982, fue denunciada un amina en dicho lugar (Joyita de Villafaña) habiendo sido trabajada por el señor Sam Roger, minero mexicano de origen irlandés. Los trabajos fueron de carácter exploratorio, teniendo conocimiento de que actualmente no se está trabajando”.

  Esa mina, según nos precisaría después el sr. González Méndez, denominó “los misterios del Chorro”, y piensa que podría ser utilizada como planta piloto para iniciar la explotación de recursos minerales, muchos de los cuales son importados en nuestro país.

  En ese mismo trabajo, el ponente particulariza otros datos, pues señala: “existen yacimientos de caolín de muy buena calidad que no son explotados. De lo anterior tiene conocimientos el C. Eusebio Murrieta Ramos, quien me ha solicitado trate de promover su comercialización.

  Igualmente al sur y centro de nuestro municipio, se encuentran yacimientos de tepetate, grava y arena, en ejidos principalmente” (1)


Fuente:

1.- Razo Guillermo. Salamanca hoy. Editorial Radar. Salamanca 1992.

lunes, 18 de septiembre de 2017

Salamanca: una Villa Barroca ¿o una ciudad en ruinas?

  Hace un par de meses, en la presentación de un libro, alguien por ahí dijo de organizar un Festival Barroco en Salamanca... o al menos fue lo que entendí. ¿Festival? ¿Barroco además? Esto lo basaba en lo que Humboldt escribió en su obra al comentar que Salamanca es (era en todo caso) una ciudad "bonita". Entiendo que el barón era políticamente correcto.

  El que en Salamanca sobrevivan tres ejemplos de arquitectura barroca no le acredita a tener semejante presunción de un festival barroco... El templo y ex Convento de San Agustín, la Parroquia Antigua y la casa de Allende esquina 5 de Mayo es lo único que sobrevive en toda la población, de lo demás, arquitectura más bien de la última década del siglo XIX y las dos primeras del XX de lo poco que queda, está en ruinas, aquí una muestra.












domingo, 17 de septiembre de 2017

Antes y ahora: Placa en la Avenida Faja de Oro

Salamanca, 1985. Fue en ese año que se amplió y pavimentó la avenida Faja de Oro. Recuerdo que aun en los setenta el pavimento llegaba hasta la calle Ezequiel Ordoñes, que era hasta donde llegaba la mancha urbana. La ahora avenida  era de doble carril y corría paralela a la calle Tampico.

El 16 de abril de 2016 tomé esta fotografía, aun estaba colocada la placa que recordaba lo ahí sucedido en ese "Año de la Patria".

Salamanca, 2017. No sé cuándo habrá sucedido el robo, cosa a la que lamentablemente nos hemos acostumbrado, ver que las placas desaparecen, y la placa, claro es que ya voló... es decir, ya se la volaron.

miércoles, 13 de septiembre de 2017

De cuando pasó Félix Ma. Calleja por Salamanca, 1810

  Sabemos que Miguel Hidalgo estuvo dos veces en Salamanca, la primera una semana luego del "grito", cuando se enfilaba rumbo a Guanajuato; la segunda, luego de la Toma de Granaditas. También sabemos que uno de los virreyes en turno, Iturrigaray pasó también pero no se detuvo, el iba a Guanajuato y solo cruzó por Salamanca, ni siquiera sabemos si entró a la villa o se siguió de largo por Temascatío pues le urgía (de algún modo) llegar al real de Minas. Sobre el paso de Maximiliano hemos dado cuenta en este blog, y también fueron dos noches las que pasó en la villa. Humboldt es otro de los personajes que en su rumbo a Guanajuato se detuvo por Salamanca, de él todo indica que estuvo alojado en el mesón que había en Temascatío pero no lo asienta en su libro. Porfirio Díaz pasó de largo, quizá solo se detuvo en la estación, cuando iba rumbo a Paso del Norte para entrevistarse con el presidente de los Estados Unidos. Pancho Villa estaba asentado en Irapuato en 1915, quizá pasó por Salamanca al igual que Álvaro Obregón que si bien estaba en Celaya, pasó por Salamanca para luego estar en el enfrentamiento en Santa Ana del Conde en donde perdió el brazo. Varios son los personajes de la historia que han estado de visita o de paso por nuestra ciudad, ahora encuentro que uno más, el más obsesionado por destruir el movimiento de Hidalgo también pasó por Salamanca: Félix María Calleja del Rey Bruder Losada Campaño y Montero de Espinosa, que luego sería nombrado virrey de Nueva España y más adelante obtendría el título de Conde de Calderón.

  Algo bueno tenía este personaje, le gustaba escribir, y de todos los acontecimientos hace un reporte. Gracias a ellos podemos darnos una idea más clara de los acontecimientos de cuando estuvo en campaña, entre 1810 y 1818 y fue él quien pidió a los comandantes llevaran un diario de campaña, uno de ellos fue Agustín de Iturbide y es en ese diario Militar por el que nos hemos ido enterando de lo que ocurría en Salamanca durante la guerra por la independencia. Calleja estaba destacado en San Luis Potosí cuando ocurre el alzamiento de Dolores, entre que se entera de los hechos y organiza su ejército ocurre la toma de Granaditas y la entrada de los insurgentes a Valladolid, para luego seguir rumbo a la capital de virreino, teniendo el triunfo en Monte de las Cruces, en las proximidades de la ciudad de México, eso ocurre el 30 de octubre de 1810; Calleja estaba ya en Querétaro iba en busca de los insurgentes y el enfrentamiento lo tienen el 7 de octubre en las inmediaciones de Aculco, son derrotados, Hidalgo se va por un lado de nueva cuenta a Valladolid para luego seguir a Guadalajara, mientras que Allende lo hace rumbo a Guanajuato. Escribe Calleja:

  "Batido y derrotado el ejército de los insurgentes el día 7 del mes último en Aculco, levanté el campo al siguiente, y me dirigí a Querétaro, donde di algún descanso a las tropas; pero con noticia de que el mayor número de los enemigos que huyeron de aquella acción, se había reunido en Guanajuato con Allende y los principales cabecillas; y que en esta ciudad, al abrigo de numerosa plebe y fuerte situación, se proponía hacer la mayor resistencia, habiendo acopiado al efecto sus mayores recursos de artillería, municiones y gente, me encaminé a aquel punto por los pueblos de Apaseo, Celaya, Salamanca e Irapuato, con  el doble objeto de reducirlos a la obediencia y organizar su gobierno, como lo verifiqué, y asegurándome las subsistencias impidiéndoselas al enemigo."(1)

  Bien me puedo imaginar el terror que había en la villa de Salamanca cundo vieron pasar a las tropas de Calleja a mediados del mes de noviembre de 1810. La fecha exacta no la dice, para el día 8 estaban en Querétaro en donde pasaron algunos días, que fueron 2, 3 o más, no lo sabemos, por lo que deducimos que fue a mitad de octubre cuando él y su numerosa tropa pasó rumbo a Guanajuato. Allá el real de minas que había padecido el 28 de septiembre la masacre de Granaditas, ahora enfrentaría el odio incontenible de Calleja.

Fuente:

Gaceta de la Regencia de España e Indias del jueves 7 de marzo de 1811. No. 32, p.242.

domingo, 3 de septiembre de 2017

Luis Chávez Orozco, distinguido historiador irapuatense

   Buscando datos de la cosa agrícola en el Bajío, encontré una referencia que me llevó a un autor del que desconocía su trabajo, el historiador Luis Chávez Orozco. Comencé a averiguar más de él y la primera sorpresa que me llevé es su lugar de nacimiento: Irapuato, la segunda es ver la gran cantidad de publicaciones que tuvo a lo largo de su vida. Razón por la cual considero importante compartir los datos que encuentro en Wikipedia y que nos dice de la importancia que tuvo tan distinguido irapuatense:

  Luis Chávez Orozco (Irapuato (Guanajuato), 28 de mayo de 1901- Ciudad de México, 16 de septiembre de 1996), fue un profesor, sindicalista, funcionario público e historiador mexicano. Fue promotor de la educación socialista, y destacado precursor de la historiografía social y económica moderna de México.

  Luis Chávez Orozco cursó sus primeros estudios en el Instituto Sollano y en la Preparatoria de León, Guanajuato. Su interés por el pasado mexicano le llevó a formarse como historiador autodidata. Fue profesor de Historia Moderna en la Escuela Nacional de Maestros en 1933, en donde fue uno de los impulsores de la “educación socialista”. Trabajó en la Secretaría de Relaciones Exteriores como jefe de Prensa y Publicidad, bajo la dirección de Genaro Estrada.

   En 1935 fue nombrado jefe del departamento de Bibliotecas de la Secretaría de Educación Pública (México), en donde coincidió con José Mancisidor, Rafael Ramos Pedrueza y Germán List Arzubide; posteriormente fue subsecretario de Educación (1936-1938); y jefe del Departamento Autónomo de Asuntos Indígenas (1938-1940), y como tal presidió el Primer Congreso Indigenista Interamericano, que se realizó en Pátzcuaro en 1940. De ahí se derivó la creación del Instituto Nacional Indigenista (hoy Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas), que impulsó junto con Alfonso Caso, Moisés Sáenz y Manuel Gamio.

  En 1941 fue embajador de México en Honduras. A su regreso participó en la organización del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, del cual fue secretario general del Comité Ejecutivo Nacional en diciembre de 1933 hasta su renuncia, en 23 de julio de 1945, en el contexto de una grave crisis en el sindicato y por diferencias con la línea impuesta por Vicente Lombardo Toledano. Posteriormente se retiró de la vida sindical y política, y desempeñó diversas labores burocráticas. El presidente Adolfo Ruiz Cortines le dio su apoyo, nombrándolo como asesor, para que pudiera dedicarse a la investigación histórica. Mantuvo este puesto hasta su fallecimiento en 1996.

 Chávez Orozco fue autor del primer libro de texto de historia, Historia patria (1934), para tercer grado, con el que pretendía “proporcionar a la niñez una explicación de los fenómenos sociales, subordinándolos al factor económico”, y conducir a la niñez “a una nueva interpretación de la historia nacional”.

  Su obra escrita es particularmente vasta, y muestra particular interés en la historia social y económica, especialmente de los grupos indígenas y la época colonial, apoyándose en documentos de archivos, lo cual destaca en en una época en la que predominaban los estudios políticos y biográficos. En sus escritos introdujo la perspectiva marxista, dando particular énfasis a la influencia de la estructura productiva en el desarrollo de las sociedades.

Entre sus obras de autoría individual se hallan:

El sitio de Puebla en 1863 (1927),
El sitio de Cuautla (1931),
La civilización maya-quiché (1932),
La civilización nahoa (1933),
La industria de hilados y tejidos en México 1829-1842 (1933),
Tres capítulos de historia diplomática. El hispanoamericanismo. La cuestión de Texas. Los límites entre México y Guatemala (1935),
Revolución industrial, revolución política (1937),
Historia económica y social de México. Ensayo de interpretación (1938)
Historia de México. Época precortesiana (1939).

sábado, 2 de septiembre de 2017

De rodillas: la veneración al Señor del Hospital en Salamanca.

  Sabemos bien, quienes profesamos la religión católica, que dentro del rito de la misa hay momentos en que se está de pie, sentado o en rodillas. Arrodillarse es el acto máximo de adoración hacia algo que se cree, en este caso a Dios o, a su representación terrena que es la Eucaristía. Habemos quienes no nos podemos arrodillar debido al problema de articulaciones, en ese caso aplica la genuflexión, que "es un acto de humildad que expresa nuestra fe en una autoridad superior a nosotros mismos". Y en México, desconozco si ocurre en otras latitudes, hay quienes hacen rituales extremos al pagar una manda y entran al templo de rodillas...

  Quizá sea en la Basílica de Guadalupe y en la de San Juan de los Lagos donde este acto ocurre con mayor frecuencia, pero aquí en el Salamanca, en el Santuario del Señor del Hospital es cosa común ver estas manifestaciones de fe y devoción, recorrer los doscientos metros de pasillo de rodillas, como lo vemos en estas imágenes. (En Fátima, Portugal, también hacen entradas en rodillas.)







  Larga es la historia de la devoción al Cristo negro del Señor del Hospital de Salamanca, su festividad es el Martes Santo, fecha que cambia, como bien lo sabemos, cada año y cae entre los últimos días de marzo y las primeras dos semanas de abril. De acuerdo con la leyenda, la imagen llegó a Salamanca hacia 1560... en términos históricos, es decir en documentos, aparece la primera referencia hacia 1720 aproximadamente, y se anota como "desde tiempo inmemorial", lo cual indica una cierta antiguedad pero no especifica cuál es. El punto está que el Santuario en Salamanca, al finalizar el siglo XIX era el cuarto en importancia en todo el país, antecedido por los de Guadalupe, San Juan de los Lagos y Chalma. Actualmente las peregrinaciones sigue, si bien no tan abundantes como antaño, la taumaturga imagen sigue siendo venerada.

  Salamanca mantiene viva la tradición de los "Tres Grandes Jueves", el Santo, el de la Ascensión y el de Corpus Christi. En las tres solemnidades hay fiesta pues son fiestas en torno a la imagen de Cristo. En la última, la del Corpus, es cuando el Santuario del Señor del Hospital se engalana durante la Octava de Corpus, tiempo en el que las asociaciones gremiales que sobreviven hacen su "entrada de la cera", tiempo ideal para visitar el Santuario que se engalana con elaboradas decoraciones de cera y flores.

viernes, 1 de septiembre de 2017

Antes y ahora: La parroquia del Sagrado Corazón

 Salamanca, 1972.- Esta toma aérea nos deja ver la capilla del Sagrado Corazón, a la derecha se ve la actual, en plena construcción, aparece el Auditorio, cuando era cine y el edificio de la Sección 24 del STPRM.

  Salamanca 1975. Ese año la capilla fue elevada a categoría de Parroquia, luego de 40 años se posicionó como una de las mejor organizadas en el Bajío.

 Salamanca 2017.- Y ocurrió, un buen día de julio que en cosa de 48 horas la esquina de Árbol Grande con Tenixtepec cambió radicalmente con la pintura que se le aplico de un tono durazno enceguecedor por decir lo menos.