sábado, 29 de octubre de 2016

¿Qué pasó con la fiesta de San Judas Tadeo en la Obrera?

  No sé lo que habrá pasado en la capilla de la Colonia Obrera, capilla que pensé estaba dedicada a ese santo pero no es así, el nombre oficial es Capilla del Divino Maestro, como quiera, allí se venera a San Judas Tadeo, incluso hay un anuncio, como lo vemos en la imagen, que dice del novenario en cada calle del rumbo, y de la fiesta el viernes 28, menciona una peregrinación del rancho del Divisador que llegaría a las 17:30 horas y que luego comenzaría la misa para seguir después la kermés.

  Llegué al lugar a eso de las 6:20 y nada, la capilla cerrada, ni una sola alma por ahí, fura de los que cruzaban el parque y nada más. Algo habrá pasado pues tampoco en San Martín, por la colonia Tamaulipas hubo evento, fuera de la habitual misa de 6. Cuetes se oyeron en la mañana y en la tarde, no supe en dónde los estaban tirando, el caso es que en la capilla de la Obrera no hubo nada de lo anunciado.

   Algunos altares estaban instalados en las calles, recuerdo el de la Insurgentes que hasta kareoke había... y uno más adelante de la capilla, en la calle Privada Juárez... también vi anuncios de rosarios ese día en el rumbo de Infonavit 3 y la calle Lázaro Cárdenas.

  Pensé, por el concepto desarrollado en torno a ese santo, habría mucha gente, pero no fue así, era prácticamente una fiesta familiar la que había cerca de la capilla pero nada más. ¿Qué pasó? no lo sé.



   Esta imagen es en el templo de Nativitas, en donde se preparaban para la misa de 7.



 Lo interesante de la tarde fue que encontré esta ermita, a un costado de la vía, del lado norte, la primera que veo de ese tipo en Salamanca.

 Moraleja: Sí hubo fiesta, yo me equivoqué de capilla, fui a la parte de la Obrera al sur de la vía del FFCC, pero la capilla de San Judas está del lado norte. Gracias Uriel por la aclaración.

viernes, 21 de octubre de 2016

¿Qué dice la peana de la virgen María en Nativitas?

   Desde hace mucho tiempo tengo la duda. Cuando noté por primera vez que había algo escrito en la piedra que sirve de base al bulto de la virgen María en el nicho central de la fachada del templo de Nativitas. Pensé era una oración en latín, pensé sería la fecha de dedicación del templo, pensé muchas cosas y me quedó la duda.

   Sabemos muy bien que la tecnología avanza a pasos agigantados. Las primeras fotos que tomé de Nativitas fueron con aquellas cámaras que había que medir luz, distancia, enfocar, me fue imposible hacer una buena toma, sobre todo que fuera nítida. Agreguemos a eso el sistema de revelado, de cuando llevábamos los rollos a La Minerva y esperábamos varios días para tener las impresiones. Los resultados no eran nada buenos.

  Cuando tuve mi primera cámara digital, ésta no era de alto pixelaje, y el zoom no daba para mucho, por lo que no logré hacer un correcto acercamiento a esa peana y la duda la mantuve.

   Ahora, como un 30x de zoom y 16px logro el acercamiento ... pero la duda la tengo pues está complicado leer lo que ahí dice,  ¿es acabo es la pax? ¿la por?... ¿1983? ¿1883? ¿1783? ¿1683?... descarto las primeras fechas y me quedo con 1983, año en el que (creo) fue recuperado el San Miguel Arcángel y puesto en el lugar que le corresponde. Dudo de 1883 pues no creo que las devociones de esos tiempos permitieran subir hasta allá a realizar una especie de grafiti. Menos aun en 1783, además de que el tipo de letra corresponda a la grafía de la época y ni que decir de 1683, cuando el templo estaba medianamente concluido o hacía poco se había concluido. Recordemos que Nativitas se funda en 1655.

   Y como la iluminación es prácticamente perfecta aprovecho para hacer otros acercamientos, el Divino Rostro me parece sumamente interesante.




jueves, 20 de octubre de 2016

De la salitrera que había en la "junta de los ríos", 1780.

  En la continua búsqueda de datos que nos digan lo sucedido en Salamanca encuentro este mapa en el Archivo General de la Nación, levantado el 28 de agosto de 1781 por la persona que tenía el asiento de la pólvora, don Teodomiro de Cañizares y, para producir pólvora era necesario el salitre, razón por la cual en 1780 y 1781 hace un viaje entre la ciudad de México y Durango para visitar las salitreras, en su periplo incluye también a San Luis Potosí.

Archivo General de la Nación/ Instituciones Coloniales/ Colecciones/ Mapas, Planos e Ilustraciones (280)/ Título: Ruta del viaje hecho por Teodomiro de Cañizares, en la visita de Salitreros desde la Ciudad de México hasta Durango.

Fecha(s): 28 de Agosto de 1781.
Nivel de descripción: Unidad documental simple (Pieza Documental)
Volumen y soporte: 1 Mapa, soporte papel marquilla con dimensiones de 66.5 x 39.7 cm
Productores: Teodomiro de Cañizares.

Alcance y contenido: México. Se observa la ruta que corrió Teodomiro de Cañizares en 1781 a los Salitreros que van desde México a Durango; Zumpango, Rosa de Castilla, Celaya, Pueblo de San Bartholo, Culiacán, Terecuaro, La Noria de Alday, San Luis Potosí, Sierra Madre, etc. El reconocimiento de 1780 abarca 537 leguas, mientras que el de 1781 abarca 1543 leguas, e incluye cuevas y tierras salitrosas. El mapa esta compuesto por dos líneas; una roja que es el camino que recorrió Cañízares de ida, y la línea verde que significa el camino de regreso. Este plano es producto del cálculo del costo que tendría la fábrica de un almacén de pólvora. (Proyecto de 1775).


   Muchos de los puntos que marca en el mapa de su recorrido eran lagunas, lugares propicios para ubicar el salitre que buscaba, vemos que de San Juan del Río continúa a la salitrera de Joseph de Aguilar,  no sé si sea por El Pueblito en Querétar o un poco antes, luego sigue al pueblo de San Bartolo, intuyo que se refiere a San Bartolo Aguascalientes o Agua Caliente, en Apaseo el Alto. De Celaya hace varias rutas, una hasta Jerécuaro, pasando por la Salitrera del Cerro del Culiacán, luego por Acámbaro. 

 De Celaya continua a San Miguel, Xichú, Dolores, San Felipe y varios sitios más, todos en los que hay salitreras los marca, por ahí continúa por Zacatecas y Durango, pero, a partir de Celaya hace una incursión a Salamanca hasta llegar a otra salitrera, de la cual nunca antes había visto referencia alguna. Menciona "la junta de los ríos", quizá sea por Pueblo Nuevo pues dice que era propiedad de Ignacio Azconoveitia.

Creo, en este documento de 1894, confirmamos que, la salitrera estaba en Valle de Santiago, en la Hacienda del Salitre.

lunes, 17 de octubre de 2016

Gelacio Barrera y José Vicente Cos, dos indultados en la villa de Salamanca, 1820


Por muchos años, especialmente en el mes de septiembre, se habla del inicio de la guerra de Independencia. Aquí en Salamanca se vuelve a enumerar el elenco de personajes que por uno u otro motivo participaron en el bando insurgente. Esos nombres nos son bien familiares, me refiero a sus nombres pues, de lo que hicieron y cómo lo hicieron poco se ha estudiado. Fuera del caso de Albino García (estudiado a profundidad por Fernando Osorno Castro) de los otros poco sabemos. A Tomasa Estéves la estudié, poco encontré, la publicación de esos datos la hice a través del Archivo Histórico de Irapuato. Sobre Andrés Delgado hay varias referencias en la Gazeta de México, en los Documentos de Hernández y Dávalos y en las Memorias de Robinson.

  La lista continua, con el presbítero Rafael García, mejor conocido como el Padre Garcilita, cura de Salamanca que en algún momento se une a las tropas de Morelos. Poco sabemos de Manuel Resámano, fuera de lo comentado por el historiador Bustamante. Hemos agregado por ahí a unos desconocidos que disparaban desde la torre de la Parroquia Antigua. Esta vez agregaremos algunos más:

  El primero va de héroe a villano, caso común en la guerra de Independencia, concepto que igual aplica para la guerra de la Reforma o la Revolución, nos referimos a Luis García que, además del saqueo que hizo, incendió el archivo, de ahí que no contemos con documentos anteriores a 1811. 

  En el texto se menciona a Tiburcio Incapié, se le pone una interrogante, habrá que saber la razón, el caso es que él se convierte en cura de Salamanca, espero poderlo estudiar a fondo más adelante. Se menciona que Gelacio Barrera y José Vicente Cos "se acogieron a la gracia del indulto", no sé si eran de Salamanca o solo revolucionaban en la villa y sus rededores, más datos de estos personajes no he encontrado aun.

Fuente:

Ortiz Escamilla, Juan. Guerra y gobierno. Los pueblos y la Independencia de México. Universidad Internacional de Andalucía. Sevilla, 1997.

lunes, 10 de octubre de 2016

Gente de Salamanca que estuvo presente en la Toma de Granaditas

  Varias veces he comentado en los otros blogs que mantengo la idea que me genera el episodio histórico conocido como “Toma de Granaditas”, especialmente el que se haga una fiesta en la ciudad de Guanajuato que se considera dentro de las más importantes celebraciones que en el calendario cívico estatal se contienen. Sabemos de la ceremonia de la renovación del fuego que, tengo entendido se celebra o celebraba cada día 28 en la Alhóndiga para que siempre esté ardiendo el fuego, símbolo de la libertad, frente a una representación de Hidalgo. La idea es interesante y no es única, la hay en varios países del mundo, pero, el que se haga en relación a la toma de la alhóndiga nos dice que el fundamento no es del todo suficiente dado que no fue un hecho brillante, sino una revancha, una ira contenida por varias generaciones que se volcó en pocas horas aprovechando el temor de los españoles congregados en el recinto. De ello podemos hacer largas disertaciones pero no es el caso, el caso es saber quiénes de Salamanca estuvieron presentes en la Toma de Granaditas.

  Uno de ellos, que participó dentro del ejército realista, dado que era capitán de Dragones del Príncipe fue José del Rivero, alcalde que fue de Salamanca durante varios periodos, recordando que en la época virreinal los alcaldes eran elegidos para ocupar periodos de un año, entraban en función el 1° de enero y tenían la posibilidad de reelegirse cuantas veces fuera necesario, así que Rivero lo fue en 1801, 1803 y 1804, quizá en otros años también, pero documentos que lo avalen solamente he visto de esos años. Sobre su participación en la toma de Granaditas vemos que: “…El señor mayor general de caballería coronel don Diego García Conde, y el de infantería teniente coronel don Manuel de la Sota Riva con sus ayudantes don Esteban Munuera, capitán de dragones de Puebla y el teniente del príncipe don Casimiro León, el capitán de la Corona don Juan Cosío, que sacó una herida contusa en el pie izquierdo en el ataque del cerro de la Higuera, y el de la misma clase ayudante del batallón de Huichapan don Antonio Padilla, desempeñaron con acierto sus encargos y obligaciones, y lo mismo los del cuartel maestre general capitanes don Saturnino Samaniego, don Francisco Diez de Bustamante y don José del Rivero, habiendo sido el primero herido de un golpe de metralla en una rodilla, en el ataque de la entrada de la cañada de Marfil, a quien y al capitán de mi escolta don Ramón Falcón, recomienda mucho mi segundo el señor conde de la Cadena, como también a sus ayudantes el de infantería de Valladolid don Manuel Gutiérrez de los Ríos, y al alférez don José Ignacio de la Cuesta” (1)

  De los asesinados el 28 de septiembre de 1810 en el enfrentamiento vemos a Benigno Bustamante, dueño, junto con su padre y hermanos, de la hacienda de San José Temascatío de Salamanca, él no vivía ni en la villa ni en la hacienda, pero era de su propiedad y tenía residencia en la ciudad de Guanajuato: “….Entre los oficiales perecieron mucho jóvenes de las mas distinguidas familias de la ciudad y quedaron otros heridos gravemente, entre ellos D. Gilberto Riaño que murió a pocos días, y D. José María y D. Benigno Bustamante; de los españoles murieron muchos de los mas ricos y principales vecinos…” (2).

  El caso más penoso y triste de lo sucedido con los vecinos de Salamanca fue el del español, encargado de la Real Hacienda, es decir, quien veía los intereses monetarios de la Corona española en la villa lo era su recaudador, Cañas quien junto con su esposa, su hija y su yerno son aprehendidos por los insurgentes cuando Hidalgo hace su entrada en la villa, son llevados a Guanajuato y una vez concluida la “batalla”, son desnudados y ejecutados dentro de la misma alhóndiga, sobreviviendo su hija. Liceaga en las Adiciones dice que: “… D. Agustín Cañas, Administrador de alcabalas en Salamanca, al que acompañaban allí, su esposa, su hija y el yerno: y aunque solo la hija quedó con vida, pero desnuda y herida tan gravemente, que duró mucho tiempo su curación en la casa a la que la llevaron. A todos los cadáveres dejaron enteramente desnudos, y tirados en el suelo, saqueados los tercios, que con efectos estaban depositados en aquel edificio, del que se veían salir a los pelotones de plebe con las lanzas y puñales escurriendo la sangre, y con los colchones y toda la ropa que sacaban muy ensangrentada”. (3)

  Uno más, del que sabemos por Bustamante en su obra que era de Salamanca y que se unió al movimiento de insurrección fue Manuel Resámano, pocas noticias tenemos, pero, por los hechos podemos deducir que también estuvo presente en Granaditas. Seguramente hubo más salmantinos en el brutal encuentro de realistas e insurgentes, pero sus nombres y sus acciones las desconocemos.

Fuentes:

1.- Parte de la toma de Guanajuato rendido al virrey por don Félix María Calleja. México, 16 de diciembre de 1810. Número 159 - Tomo II

2.- Alamán, Lucas. La revolución del cura Miguel Hidalgo. Capítulo II, 2a. parte

3.- Liceaga, José María. Adiciones y rectificaciones a la Historia de México. Edición facsimilar conmemorativa. México, 1985. p 156

jueves, 6 de octubre de 2016

El hijo de Bartolomé Sánchez Torrado que vivió en Salamanca

  Gracias a que un buen amigo me hizo llegar un documento de lo más interesante del pasado de Salamanca, del 7 de marzo de 1632, encontramos en él una referencia sobre algo que había cuestionado hace poco en este espacio sobre si Bartolomé Sánchez Torrado tuvo o no descendencia. Aquí comprobamos que sí la tuvo, con el detalle que su hijo dejó de usar el apellido Sánchez por el de García, manteniendo el Torrado. Así es como vemos en la imagen que el hijo de Bartolomé era Juan García Torrado. Habrá que encontrar ahora, la descendencia que él tuvo, cosa un poco complicada pues el apellido García estuvo bastante difundido en la zona.