La Visita de las Siete Casas, por Salamanca y Valle, versión 2017

   La tradición la tengo más que arraigada pues en la Salamanca de los años sesenta del siglo XX me tocó ver los Monumentos que se levantaban en los templos, tiempo en que la mezcla de olores de cera, manzanilla, naranja agria y los decorados con gladiolas blancas y azucenas rojas eran profusas. De lo alto del altar mayor caían telas blancas y al centro emergía la caja vacía... todo acomodado en base a tres llegando hasta doce, todo ello con un simbolismo que ahora sí entiendo, en su momento era un verdadero festín el que me daba al contemplar los Monumentos de Semana Santa. Las cosas han cambiado mucho, los Monumentos ya no tienen la monumentalidad de antes pero la tradición de visitar las 7 casas sigue. Esta fue mi ruta.

   Aproveché la fecha para visitar templos que normalmente no están abiertos pues son comunidades rurales en las que solamente una vez a la semana se oficia y nunca he coincidido, así que en este Jueves Santo mi Primera Casa fue en el templo de San Vicente en la comunidad de Garma, en Valle de Santiago, estaban trabajando en el decorado.

   Mi Segunda Casa fue en la Capilla de San José, la cual es bastante bella, formaba parte de la Hacienda de La Tinaja, era temprano y estaban trabajando en el decorado, de seguro les quedó bastante bien pues estaban tejiendo espigas de trigo.

   Mi Tercera Casa fue en uno de los templos más antiguos de la región sur del estado de Guanajuato, se dice que fue en 1550 cuando se otorgó licencia para su construcción. Se trata del templo de San Jerónimo en Araceo, municipio de Valle de Santiago, ahí estaban trabajando en el monumento.

   Mi Cuarta Casa fue en la Colonia Pradera del Sol, el templo de Nuestra Señora de la Luz.

   Mi Quinta Casa fue en otro templo muy antiguo, el de Santa Rosa de Lima en la comunidad de Parangueo, Valle de Santiago.

  Mi Sexta Casa fue en la parroquia de Santa María Reina, en Salamanca.

  Mi Séptima Casa fue en el templo del Carmen de la colonia Aztlán en Salamanca, en la cual colocaron un enorme corazón hecho con cera escamada, de la que se hace aquí, en Salamanca. Sé muy bien que esto no es concurso, pero este fue el que me gustó.

  Para tener una idea de lo que eran los Monumentos en aquellos dorados años de los sesenta, esta es la única imagen que he encontrado de la época, se trata de la Parroquia Antigua.