Lo ocurrido a los Carmelitas de Salvatierra con Iturbide en 1814

   En la actualidad decimos "agarrar parejo" cuando no hacemos diferencia entre una y otra cosa y todo lo ponemos en un mismo plano, eso fue precisamente lo que Iturbide hizo con los frailes carmelitas de Salvatierra que, entre otras, tenían las haciendas de San José del Carmen y la del Encinal, y fueron objeto de escarmiento por parte de Iturbide al hacer movimientos sin que el Comandante Militar de Guanajuato lo autorizara, en los siguientes documentos veremos cual que el alcance de este desacato.

 "Excelentísimo Señor:

   A los religiosos carmelitas, que sin superior permiso de V.E. ni mi anuencia, se pasaron a establecer a Salvatierra y haciendas suyas en aquella demarcación, voy a hacerles que se retiren, porque este mal ejemplo ha sido de escándalo en toda la provincia. Los patriotas de los pueblos que tienen sus fijos ya de comercio ya de agricultura en los países que ocupan los rebeldes solicitan con insistencia licencia para atenderlos, lo que no sucedía antes, pues forman un paralelo entre sí con los carmelitas, y poco menos que con descaro, representan que si aquellos por solo su interés se pasan a los países insurgidos, porque a ellos teniendo mujer e hijos que mantener no se les ha de permitir lo mismo que a los otros, hay más, que dichos religiosos¿, para resarcir la opinión que tenían perdida entre los sediciosos y para ganar su afecto, necesitan de hacer actos positivos muy conocidos en su favor, y esto no puede ser sin que en razón directa perjudiquen a los seguideros de nuestro justo partido: a estas razones (bastantes en mi concierto para hacer lo que he resultó y voy a ejecutar, podría añadir otras muchas que las apoyan, pero no las expongo por no cansar la ocupada atención V. Exa., cuya aprobación espero merezca la disposición indicada. -Dios guarde a V. Exa. muchos años. Salamanca, 7 de marzo de 1814. -Excelentísimo Señor. -Agustín de Iturbide. -(Rúbrica.) Excelentísimo Señor Virrey Don Félix María Calleja.-

   Las cosas tomaron otro curso ya que en el Bajío varios eran los caudillos, los insurrectos que revolucionaban por el rumbo, uno de ellos, el de no muy buen renombre, el Padre Torres a través de uno de sus seguidores, de apellido Rosales, asalta a los Carmelitas refugiados en una de sus haciendas, Iturbide lo notifica de la siguiente manera:

 Excelentísimo Señor:

  "En carta Núm. 160 fecha en Salamanca el 7 del mes inmediato anterior, dije a V.E. que iba a hacer que se retirasen de Salvatierra los religiosos carmelitas que se habían establecido en aquel convento que antes abandonaron, y manifesté a V.E. las razones que me movían a obrar de aquel modo; yo estaba firmemente persuadido de que no había medio entre comprometerse con el partido de los rebeldes dichos religiosos, o que recibieran un golpe si cumplían con sus deberes cristianos y políticos. Se ha verificado el último extremo; la noche del 21 al 22 del mes citado, se llevó el Insurgente Rosales por orden de su caudillo el Padre Torres a dichos religiosos, logrando escapar solo el padre prior por haber tenido la suerte de poderse ocultar y que no hallasen los bandidos, a causa de la violencia o precipitación con que estuvieron en Salvatierra, temerosos de que les buscase alguna partida nuestra, lo que comunico a V.E. para el debiendo conocimiento de su superioridad. -Dios guarde a V.E. muchos años. -Apaseo 4 de Abril de 1814. -Excelentísimo Señor. -Agustín de Iturbide. -(Rubrica). -Excelentísimo Señor Virrey Dn. Félix María Calleja. (2)

Y el virrey responde:

   Por los oficios de V.S. Núm. 160 y 175 de 7 de marzo y 4 del corriente, quedo impuesto de que habiendo trasladado al Convento de Salvatierra los religiosos carmelitas que antes lo ocupaban, fueron sorprendidos por los rebeldes y conducidos al cabecilla Torres, antes de recibir la intimación que V.S. iba a hacer a dichos religiosos, para que se retirasen de aquella ciudad, entre tanto que no tuviese guarnición, cuya medida había sido muy oportuna por las razones que V.S. expresa. -Dios, etc. -México Abril 20 de 1814. -(Rubrica). Sr. D. Agustín de Iturbide. (3)

   Es bueno recordar otro pasaje, no ocurrido en Salvatierra, pero sí con la Orden Carmelita, al inicio de la Independencia, en su convento de Toluca, Luego de esto, la hacienda carmelita de San Nicolás Peralta sería saqueada por los insurrectos que seguían a Hidalgo.

Fuentes:

1.- Publicaciones del Archivo General de la Nación. Correspondencia y Diario Militar de Don Agustín de Iturbide, 1814. Tomo II. Secretaría de Gobernación. Talleres Gráficos de la Nación. México, 1926. p.34-35

2.- Ibid. pp.59-60

3.- Ibid. p.65