martes, 18 de octubre de 2011

Los primeros tres kilómetros de la vía del tren Salamanca-Valle, "La Burra".

Hemos logrado reconstruir, casi completamente la historia de como fue que se dio la construcción del novedoso, para su tiempo, ferrocarril Salamanca-Valle-Jaral. Ya nos sorprendimos al saber que el proyecto original era llegar hasta Pátzcuaro vía Morelia. Ya nos enteramos de que el verdadero dueño de la Burra fue el General Manuel González, de que él recibió de regalo el material para construir el puente que llevaría su nombre y que luego, al cambiar la vía original por la "ancha" hubo necesidad de construir un nuevo puente, El Negro. Todo esto ocurrió en el siglo XIX. En la fotografía vemos una vía en el patio de maniobras de la estación Salamanca, tomada apenas el domingo 16 de octubre 2011, al igual que todas las demás fotografías.

En este plano, una auténtica reliquia, vemos donde estaba ubicada la estación de La Burra, vemos un poco a la derecha, arriba, el corral. Quizá este era donde se resguardaban los animales que serían embarcados en el FFCC Salamanca-México o Salamanca-Ciudad Juárez. Frente a él pasaba la Calle del Pueblo, que es actualmente la Emilio Carranza, más a la derecha se alcanza a leer Molino La Providencia, allí actualmente hay un estacionamiento.

Este es el mapa satelital de Salamanca en la actualidad, vemos como se ha desbordado la mancha urbana en la región sur, lo marcado en naranja es lo que recorrimos esta vez para ir documentando con imagenes lo que queda de la ya legendaria Burra, la que con cariño mucha gente se refería como "La Burrita de Valle", y que las nuevas generaciones, desde los años 80 del siglo XX no llegaron a conocer.

Este es en la actualidad el patio de maniobras en la estación de Salamanca, visto en dirección oriente. El durmiente que vemos en primer término es lo único que queda del primer tramo de la vía Valle-Salamanca. Arriba se notan unos durmientes de concreto apilados, es allí donde se ubicaba el corral que vimos en el plano de 1895. El muro de ladrillo al fondo fue parte de La Fortaleza, la fábrica de conservas que hubo durante cuarenta años en Salamanca.

Este es el segundo tramo, entre las calles Emeteria Valencia y Neptuno. Aquí vemos el terraplén que se construyó. Recuerdo que, dentro de los documentos contenidos en el archivo personal del General González, aparecen al menos 6 entre cartas y telegramas, en donde se relata el pleito que el Ing. Barton tuvo con el proveedor de piedra para construir esto que ahora está abandonado.

En la esquina de la calle Neptuno con Progreso vemos los vestigios de rieles y durmientes. Fueron de 12 a 15 mil los durmientes solicitados para el tendido de Salamanca a Valle, muchos de ellos acabaron como leña, otros como bardas y algunos más siguen allí enterrados.

Sobreviven antiguos vestigios de lo que me atrevo a suponer que fue la vía original, la que construyó Barton en 1889, que era la de "vía angosta", al lado vemos la "vía ancha", la que fue constituida cuando se implementaron los nuevos trenes. Nos tendremos que dar a la tarea de verificar la fecha en que este cambio de vía ocurrió.

Calle Progreso esquina con López-Lira, aquí vemos en primer plano y en amarillo el uso que luego se le dio a uno que otro tramo de vía, algo no privativo en Salamanca, lo he visto en todos lados donde hay patios de maniobra próximos...

A los 600 o 700 metros de la que fuera su estación, vemos, a la altura de la Calle Primavera y Progreso la curva que comienza a dar el trazo, pues la salida era oriente-poniente y aquí es donde tuerce para tomar rumbo sur, rumbo al Valle de Santiago.

Más o menos por donde debería cruzar la Avenida del Trabajo y que es donde se ubica la que todos conocen como "la cuchilla", el terraplén sigue, notamos claramente como al oriente es más alto, en relación a la parte poniente del propio terraplén. Aquí los vestigios son escasos y ya en muy malas condiciones.

Entre la avenida del Trabajo y Matamoros es donde la curva termina, ahora si ya la vía va en dirección sur.

El terraplén es utilizado como estacionamiento, como basurero, incluso, como lo vemos en la foto, como jardín. Nótese el uso de los durmientes para delimitar este "jardín privado".

Pedazos de vía seguimos viendo, ya más bien ocasionalmente, a lo largo del terraplén... vamos ya en el primer kilómetro.

En el cruce de Matamoros quedan aun tramos de vías...

pedazos de vías...

Por aquí hace mucho tiempo, principios del siglo XX, aun cruzaba el arroyo de San Antonio, el que luego fuera practicamente desaparecido y sobre de él se construyera la calle peatonal que lleva precisamente ese nombre; consecuentemente debió haber existido algún pequeño puente para que la Burrita pudiera pasar, pero de ello no hay dato alguno, mucho menos vestigio. Lo que si vemos ahora es que esta parte del trazo original del tren a Valle fue reciclado y es ahora el que da salida a la gente que habita las colonias La Gloria, Colosio, Nuevo México, entre otras.

Pasa luego el trazo de la vía por los linderos de lo que fue el pueblo de Santa María Nativitas y la villa de Salamanca, llegamos al río Lerma, el que cada vez está más contaminado. Si notas con atención verás al fondo, en el horizonte el cono perfecto del cerro del Culiacán. Estamos sobre el Puente Negro.

Y este es el Puente Negro, el que se levantó justo en donde el inglés Ernest A. Barton levantara aquel puente legendario, el primero de metal en Salamanca y, quizá, el primero metálico construido en el estado de Guanajuato, pero ese que donó la Compañía de Ferrocarril Belga, fue sustituido por el que hasta hoy día vemos. En la actualidad el puente es para uso vehicular.

A unos 200 metros del Puente Negro encontramos este pequeño puente que libraba algún arroyo que seguramente descargaba en el Lerma cuando, en aquellos años, siempre llovía en Agosto y Septiembre. Esto es más o menos en las calles Santa Ana y del Sol.

Lo que fuera todo un espectáculo a finales del siglo XIX, ver pasar la Burra sobre el puente, es algo que ya muchos salmantinos ni siquiera saben que existió. Así se ve el Puente Negro desde "el otro lado del río".

Aquí ya estamos a un kilómetro al sur del Puente Negro, en una zona donde hay muchos campos deportivos, de ese fútbol llanero, el terraplén de La Burra sigue destacando.

Y aquí concluyen los primeros tres kilómetros de recorrido de la Burra al Valle, veremos luego que más sorpresas guarda el resto del trazo.


¿Qué opinas Bob?

1 comentario:

  1. Benja,
    Creo que La Burra ha estada esperándote para revelar su historia. ¡Adelante!

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