Como lo vimos ya en varios artículos anteriores, en el municipio de Salamanca existen 98 templos católicos, la mayoría son capillas, una docena parroquias. Creo que todos los que somos de Salamanca cuando recibimos visitas que vienen, entre otras cosas, a conocer la población y su entorno, siempre les indicamos que conozca San Agustín, la Parroquia Antigua y el Señor del Hospital, diciendo que son los tres ejemplos excepcionales de arquitectura religiosa con que contamos. Y sí que lo son, pero a esa lista le debemos de agregar, al menos cuatro más: el Santuario de Guadalupe, Nativitas, las Tres Caídas y San Juan de la Presa; que son los templos más antiguos de la ciudad.
Será bueno saber que hay otro recinto que, siendo de corte moderno, bien lo podemos catalogar como un lugar excepcional que, definitivamente, hay que conocer. Su fachada no nos dice mucho, por no decir que nada. Pero una vez dentro, nos sorprenderemos al ver el trabajo de pintura decorativa que allí se desarrolló manteniendo el más puro de los patrones de diseño propio de mitad del siglo XIX. Esta decoración no tiene más de un año de haber sido terminada, y el resultado es bastante bueno.
Se trata de la Parroquia de San Antonio Abad, en la colonia Guanajuato. El recinto comenzó a construirse en 1969 como una capilla de corte sencillo, con el paso del tiempo y el crecimiento de la población, el templo fue ampliado y esto es lo que hoy día nos muestra:
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